mardi 12 janvier 2010

Paris interior

Entrada

Como cualquier otra del barrio séptimo y el código es el mismo de hace diez años.



Rez-de-chausée

Mme. Melnier saluda y muestra con orgullo el espacio que le separa los dos dientes de arriba. Hasta ayer supe que se llamaba Dorotea, después de darle una caja de mazapanes y preguntarle: -Por cierto, ¿cuál es su nombre de pila?-
Vinieron los relatos de su familia nómada, de los cambios de apellido antes de llegar a un confortable Melnier, de lo difícil de ser extranjero.


Algo mío, algo que está seguramente cerca de la última costilla del lado izquierdo, ese lado siniestro, obscuro y femenino de mi ser, lleno de limo transportado por los ríos y por los vientos, también tiene una separación de dientes muy pronunciada, pero no se muestra nunca porque la luz no es para eso, no entra en el organismo para llenar de dorado los órganos, sobretodo si son órganos imaginarios y por lo tanto invisibles. En ese lugar donde siento lo ajeno (que al final es todo, porque todo me parece ajeno), es ahí donde guardo la sonrisa de Mme. Melnier y las notas de piano de las tardes antes de Navidad. También guardo las llaves debajo del tapete, guardo la respiración para después abrir todo el pecho al exhalar. Se respira a casa, a mi primera verdadera casa.



L'Ascenseur

¿Te acordabas cuán estrecho era aquí? Cómo nos acomodábamos con dificultad hasta lograr encontrar un sitio confortable entre tantas maletas, tantas subidas y bajadas. El número de emergencia siempre a la vista, en caso de caer, de descomponerse. Sólo dos personas, sólo pocos kilos. Cuarto piso, sexto piso y subir la escalera hasta el séptimo cielo.



Fenêtre de toit

Es un vasistas con torre Eiffel integrada y hoy caen copos de nieve dibujados, casi transparentes con sus figuras frágiles. Un copo de nieve es frágil y delicado tanto que se puede quedar dormido entre mis pestañas sin molestarme.



La diminuta cama

Derecha o izquierda, de 23 horas a las 4:30, abismo derecho para cambiar al izquierdo de 4:30 a 9 horas. Son costumbres del país.



Albúm de imagenes

Habría que encontrarlas en las hojas muertas del papel de seda y describirlas, también están grabadas en los lunares de nuestra piel. Es un lugar secreto la vida, sobretodo la de todos los días donde no puedes atrapar toda la luz de las horas que pasan, de los sonidos queridos, del roce de dedos, no puedes atrapar las sensaciones dentro de ti que dicen:- soy feliz-
Ni tampoco a la pequeña voz de tu conciencia: -estás obsesionada con atrapar la luz, el sol, la vida, los momentos que se escapan, pero eres feliz.